¿FORMA DESEADA, DESEAMOS Y SOMOS CUERPOS DESEANTES?

¿FORMA DESEADA, DESEAMOS Y SOMOS CUERPOS  DESEANTES?

¿SON NUESTROS CUERPOS REPRIMIDOS DE UNA EPOCA?

¿SON NUESTROS CUERPOS REPRIMIDOS DE UNA EPOCA?

miércoles, 12 de noviembre de 2008

TERCERA ZONA. EL CUERPO EN ESCENA UN MUNDO INIMAGINADO


TERCERA ZONA
EL CUERPO EN ESCENA UN MUNDO INIMAGINADO
Cuerpo y mente se conjugan en una excelente plasticidad, expresión artística en todo su esplendor, nexos claros entre el mundo interior y el mundo exterior, cuerpo portador de sentido y de formas de expresión en la relación con el otro.
El cuerpo de esta pequeña niña de grado quinto es efectivamente un elemento plástico en todo su poder expresivo, da paso a la manifestación de inseguridades y temores frente al otro, su padre, a quien, siendo aún joven , con 37 años, representa como un señor de avanzada edad y con un ademán de amenaza. Su puesta en escena es muda, ejecuta gestos de rizas, abrazos, corretea, simula el trabajo en el campo, la llegada a casa, curiosamente se sienta y se descalza (se quita los zapatos). Hace el ademán de lavarse los pies, de comer y luego va a la cama. Allí representa una discusión y levanta repetidamente sus manos en un símbolo de violencia y amenaza. Continuamente muestra un golpear, o por lo menos el impulso de hacerlo.
En la institución la niña se caracteriza por tener una admirable expresión corporal, hace parte del grupo de danzas y del grupo de teatro, los cuales oriento; tiene una hermanita un año menor, parecen mellizas y ambas participan con frecuencia en actos culturales, no sólo en la institución sino también en diferentes espacios del municipio y ahora se están preparando para representar al municipio, Sonsón, en la etapa departamental del evento Antioquia vive la danza.
Luego de aplaudir la espléndida actuación no sólo de ella sino también las de sus compañeros, establecí un diálogo con la niña, le pregunté quien era el señor representado por ella, me respondió que el papá, le interrogué nuevamente, su papá es de mucha edad?, a lo cual dice, no , el tiene 37 años pero parece mayor . “Imagínese profe que no quiere dejarnos ir a la Ceja, que tiene que ser con mamá, que ella tiene que dormir con nosotras, le dijimos que vamos con dos profesoras, que son responsables pero él dice que no y que no, mi papá alega por todo, nos dice que para que bailamos o presentamos teatro, que esas son bobadas, nos alza mucho la mano y hasta a mi mamá, cuando se acuestan es peor, mi mamá ni le puede hablar de eso. Claro que él también nos abraza y nos trae mecato cuando viene del pueblo”.
El rostro de la niña que generalmente está enmarcado por una preciosa sonrisa, se opaca, sus ojos se encharcan y expresa “Profe, no ve que ya le dijo a mi mamá que yo termino quinto y no más, que no me va a entrar a bachillerato porque las mujeres no necesitan estudiar para casarse, para ser mamás y coger una cocina”.
La escuela y yo, obviamente como maestra enamorada del teatro, anhelamos construir sujetos que se manifiesten en todo sentido, tenemos la danza y el teatro como formas de expresión, como rutas de escape a las problemáticas que vivencian los estudiantes., ahora estamos viendo el teatro como alternativa para conocer sus miedos, identificar múltiples situaciones como la rabia, el inconformismo, la rebeldía. Este caso por ejemplo me inquietó, las “gemelas “, como las llaman cariñosamente sus compañeros, son todo lo contrario a lo que podría esperarse a raíz de su situación, también creo que todas sus intervenciones buscan evadir su vida diaria en casa.
La niña logró hacerse entender y pudo por fin liberarse, dando a conocer lo que le acaece. A su temprana edad logró mostrar que su cuerpo percibe, siente, actúa y expresa el mundo, logró posicionar su cuerpo deseante a través del cual el sujeto se construye. La invitación a la puesta en escena vino de afuera, desde el área de Castellano, logro vamos a actuar, la estudiante fue más allá del reto, del actuar, llegó a la imaginación y de allí al deseo, posiblemente anhela que alguien le ayude a cambiar el pensamiento de papá, o que papá entienda que ella quiere aprovechar las oportunidades que la escuela le ofrece para crear, ser, desear, vivir, experimentar, hilar y tejer con todo el cuerpo.
Estos procesos ganan adeptos, pero al mismo tiempo ganan detractores y lo más triste es que se presenta dentro de los mismos compañeros de trabajo, una de las profesoras dijo a mis niñas: “para ustedes es más importante el teatro y la danza que el refuerzo académico, entonces vayan que les den el diploma en eso”.
VILMA DEL SOCORRO CÀRDENAS GÒMEZ
ESTUDIANTE CUERPO
REGIONAL ANTIOQUIA.