ESPACIO DE TERCERA ZONA
Como podemos ver en la imagen el ser humano a muy temprana edad necesita del juego para expresarse, sentir al otro, distraer su mente de la rutina en que vive; es decir, hace parte de la experiencia humana y es vista en todas las culturas por ello es considerado como espacio de tercera zona, donde su objetivo es conectar al mundo real y al mundo imaginario.
¿Pero que relación tiene el juego con lo que llamamos cuerpo?
Si bien el cuerpo es el instrumento que tiene el espíritu para expresar sus emociones, por tanto es a través de él que el espíritu percibe un sin número de sensaciones que se manifiestan a través del juego y es el juego el que brinda ese espacio y como lo se afirma en la lectura “el juego aborda el concepto de cuerpo como elemento plástico en su poder expresivo, como instrumento polivalente de la acción, de creación y que es potencia de comunicar”.
Escuela, juego, cuerpo:
Como practica pedagógica el juego es considerado como espacio de aprendizaje y alternativa de esparcimiento para la adquisición de conocimiento.
Intencionalidades pedagógicas:
Las practicas pedagógicas en la escuela son todavía espacios donde el cuerpo es sometido a clases magistrales, donde el docente se preocupa por manejar el concepto de memoria y de disciplina olvidando que sus estudiantes son un potencial digno de admirar y explotar.
Por ello propongo que el docente en primera instancia se pregunte el porque de su quehacer como docente, si realmente su pretensión es forman niños que le sirvan a una sociedad o Eligio ser docente porque le toco.
Luego de su análisis brindarse la oportunidad de cambiar esa monotonía incluyendo en sus clases el juego, dejando de lado la teoría de la disciplina y tomando herramientas o estrategias que motiven a sus educandos. Y descubra el maravilloso mundo de los niños.
Pregúntese:
¿Cuáles son mis prácticas pedagógicas?
¿Qué entiendo yo como cuerpo?
¿Qué es disciplina en la escuela?
¿Qué puedo aprender de los educandos?
HERMENCIA PIRAQUIVE CORREDOR
IX SEMESTRE